Tapa del libro de
Daniel Gutman, “El amor judío de Mussolini. Margherita Sarfatti: del fascismo al exilio”. |
En 1912 conoce a Benito Mussolini. Entre ambos nace
una relación que se transformará en un prolongado romance durante 26 años. Tal
sentimiento acercará a Sarfatti, de origen socialista, a posiciones cada vez
más cercanas a las de Mussolini, hasta tal punto que en 1918, Margherita se
convierte en redactora de “Il Popolo d'Italia”, periódico fundado y dirigido
por el futuro Duce.
Mussolini tuvo decenas de amantes, pero Margherita no
fue una más: su relación duró más de dos décadas y estuvo siempre marcada por
la polémica. El Duce siempre tuvo una buena relación con los judíos en general
y con los sionistas en particular. Así, por ejemplo, tuvo al judío siciliano
Guido Jung (1876-1949), un industrial y miembro del Partido Nacional Fascista,
como ministro de Finanzas entre 1932 y 1935 (éste, fascista fanático, dejó su
puesto para alistarse como voluntario en la guerra en Etiopía).[2]
Tapa de la
biografía de Mussolini escrita por Margherita Sarfatti: “Dux” (Duce). |
En 1924 se queda viuda de Cesare Sarfatti (1867-1924),
un abogado judío de Padua, y a partir de entonces se dedica a escribir una
biografía de Mussolini, la cual se publica inicialmente en 1925 en Inglaterra
con el título “The Life of Benito Mussolini” y al año siguiente en italiano con
el título de “Dux”.[3]
En 1938, caída en desgracia debido a la implementación
por Mussolini de las leyes raciales, y obligada a exilarse, luego de recorrer
distintos países, vivió siete años en Uruguay y Argentina (1939-1946). En la
capital argentina, cortejó a intelectuales de la oligarquía anglófila como
Victoria Ocampo (1890-1979), Jorge Luis Borges (1899-1986) y Adolfo Bioy
Casares (1914-1999), y algunos republicanos españoles exilados como Rafael
Alberti (1902-1999) y Arturo Cuadrado (1904-1998). Y es que la Sarffati necesitaba por
entonces borrar su pasado fascista y reivindicar su condición de judía para su
supervivencia.[4]
A la izquierda,
Benito Mussolini arrestado por los suizos en 1903. A la derecha, Menajem
Beguin buscado por la policía soviética en 1940.
En julio de 1947 Margherita Sarfatti, con 67 años,
regresó a Italia. Allí, se convertiría en un personaje incómodo, demasiado
próximo al antiguo régimen. En 1961, cuando murió en su casa, cerca de la
frontera con Suiza, los italianos ya habían condenado al olvido a la que supo
ser la reina sin corona del fascismo.
La actriz estadounidense Susan Sarandon interpretó el
papel de Margherita Sarfatti en la película “Cradle Will Rock” (1999), estrenada
en castellano con el título de “Abajo el telón”, escrita y dirigida por Tim
Robbins. Sarandon comentó acerca de su papel:
«Margherita
es una figura histórica de primera línea. Fue la amante de Mussolini y estuvo
sumamente involucrada en el origen de los movimientos artísticos italianos. Fue
mecenas de los nuevos pintores en Italia. Vino a los Estados Unidos para vender
la imagen de Mussolini entre los norteamericanos, y lo hizo a través de la
columna de “Hearst” buscando financiación para
[1] Margherita Sarfatti (1880-1961), nacida
Margherita Grassini en el seno de una rica familia veneciana judía. Fue una
intelectual, escritora, coleccionista y crítica de arte.
[2] Véase Nicola De Ianni, Il ministro soldato. Vita di Guido Jung.
Soveria Mannelli, Catanzaro: Rubbettino Editore, 2009.
[3] Margherita G.
Sarfatti, The Life of Benito Mussolini.
Foreword by Benito Mussolini. London: T. Butterworth Ltd., 1925 [Whitefish, MT:
Kessinger Publishing, 2004]; Dux.
Prefazione di Benito Mussolini. 32 illustrazioni fuori testo e 5 autografi. Milano: Mondadori, 1926. Dada la
notoriedad del personaje y la familiaridad de la autora con el mismo, el libro
tuvo un increíble éxito editorial y se vendieron 17 ediciones; traducido a 18
lenguas incluso el japonés y el turco.
[4] Daniel Gutman, El Amor Judío de Mussolini: Margherita Sarfatti, del fascismo al exilio.
Buenos Aires: Editorial: Lumiere, 2006.